
Marie Lu
Año: 2013
Páginas: 368
Ediciones SM
Tras escapar de las garras de la República, June y Day llegan a Vegas y
se enteran de algo inimaginable: el Elector Primo acaba de morir, y su
hijo Anden ocupará su puesto. Con la república al borde del caos, los
dos se unen a un grupo rebelde de Patriotas que están dispuestos a
rescatar al hermano pequeño de Day y facilitarles la huida a las
Colonias. Los Patriotas solo les piden una cosa a cambio: que maten al
nuevo Elector.
Opinión personal
Al final de Legend, dejábamos a June y Day huyendo de Los Ángeles con la decisión de ir a las Vegas, para conseguir contactar con los Patriotas. En Prodigy los recuperamos en el mismo punto, June y Day, hechos polvo tienen como objetivo que los Patriotas les ayuden a encontrar al hermano de Day y sobre todo, les ayuden a recuperarse de las heridas.
En su llegada a Las Vegas, descubren una ciudad militarizada que puede llegar a ser un callejón sin salida pero allí, entre la multitud, se cruzan de nuevo con Kaede, quien se confirma que forma parte de los Patriotas y les lleva hacia el cabecilla de la organización, el cual les promete ayudarles a cambio de algo: matar al nuevo Elector Primo, Anden.
Ambos se verán envueltos en una red que no les satisface del todo, donde las desconfianzas son mutuas pero las obligaciones y tratos hay que cumplirlos.
De nuevo tenemos una aventura vertiginosa, que nos lleva de lado a lado de La Republica y nos deja descubrir incluso Las Colonias, descritas y vistas como un lugar bastante más diferente del que podríamos imaginarnos, donde las diferencias entre clases también parecen estar presente. De nuevo las lealtades no están aseguradas en esta lucha y las dudas son constantes tanto para June como para Day.
Una lectura trepidante y que con ese final nos deja con muchas ganas de ver cómo se desarrolla esta nueva situación política que implica a partes iguales a nuestros protagonistas.
En su llegada a Las Vegas, descubren una ciudad militarizada que puede llegar a ser un callejón sin salida pero allí, entre la multitud, se cruzan de nuevo con Kaede, quien se confirma que forma parte de los Patriotas y les lleva hacia el cabecilla de la organización, el cual les promete ayudarles a cambio de algo: matar al nuevo Elector Primo, Anden.
Ambos se verán envueltos en una red que no les satisface del todo, donde las desconfianzas son mutuas pero las obligaciones y tratos hay que cumplirlos.
De nuevo tenemos una aventura vertiginosa, que nos lleva de lado a lado de La Republica y nos deja descubrir incluso Las Colonias, descritas y vistas como un lugar bastante más diferente del que podríamos imaginarnos, donde las diferencias entre clases también parecen estar presente. De nuevo las lealtades no están aseguradas en esta lucha y las dudas son constantes tanto para June como para Day.
Una lectura trepidante y que con ese final nos deja con muchas ganas de ver cómo se desarrolla esta nueva situación política que implica a partes iguales a nuestros protagonistas.
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