Lectura. Gente que viene y bah

Gente que viene y bah
Laura Norton
Año: 2015
Páginas: 320
Espasa

De Bea, la arquitecta joven, talentosa y guapilla que protago­niza esta novela, no se puede decir que sea gilipollas, pero de lo que no se puede dudar es de que su karma es tirando a pésimo: en la misma semana, pilla a su novio (perdón, su PROMETIDO) enrollándose con una de las presentadoras más monas DE LA TELE, para, acto seguido, ser despedida con una indemnización ridícula.

Con el desastre en los talones, Bea no tiene más remedio que volver a su pueblo natal, donde, además de un paisaje idílico, le espera un futuro incierto, una familia como poco peculiar y un vecino digamos que «misterioso».

Opinión personal

Hacía semanas que una lectura no me enganchaba tanto, Gente que viene y bah mantiene un ritmo rápido, ágil, conversaciones peculiares y hechos aún más estrambóticos te mantienen atenta a sus páginas y si además, cuenta con una prota que cae bien, a pesar de sus meteduras de pata, y con la que a veces sientes hasta vergüenza ajena, el éxito está asegurado.

"¿De verdad te vas a poner así de tremenda?
- Llevo tremenda una semana, por si no te habías dado cuenta.

Sí, lo de esconderte en los armarios y detrás de las plantas me dio una idea.

- ¿Me viste en el estudio?
Como para no verte. Un ficus no es la mejor planta para ocultarse... "

Nuestra protagonista femenina es Bea, una arquitecta, que a pesar de ser buena en su trabajo vive un tanto eclipsada por su novio, ahora prometido, también arquitecto, ya que es él quien se lleva todos los aplausos. Todo empieza con una lista ¿qué lista? Esa, que para Bea es normal, aquella en la que pones 5 famosos/as por los cuales podrías ser infiel a tu pareja, no se consideraría ni infidelidad según sus propias palabras, vía libre... Cual es la sorpresa cuando una noche en una fiesta, Víctor, que así se llama el prometido, conoce a una de esas mujeres de su lista ¿quién podría imaginarlo? A partir de esa noche la vida de Bea va cuesta abajo y no solo porque su vida sentimental, apunto de casarse, se rompa en pedazos sino porque también es despedida de su trabajo ¿Quién dijo mala suerte?

Decidida a salir a flote Bea opta por refugiarse en la casa familiar de Cantabria, donde conoceremos a unos personajes más pintorescos todavía que en más de una ocasión dejarán frases y conversaciones para el recuerdo. Contamos por tanto con la madre, una curandera reconocida, Jonás, un padre ausente ya que trabaja de pescador, Débora, la hermana mediana con un secreto por revelar, Irene, la hermana mayor y alcaldesa decidida a lograr sus propósitos, León, el hermano pequeño recién salido del armario y Diego, un pelirrojo misterioso, padre, viduo y dueño del aserradero con el que Bea se las tendrá que ver en varias ocasiones.

No quiero olvidar al guardia civil, a Teo, Fin, Juan o Ingrid, que con otras apariciones también dejarán escenas tanto de humor como de drama pues en definitiva, esta es la narración de una superación, de una caída y vuelta a levantar (una y otra vez) y con muchos toques de humor en los que te saca la carcajada incluso porque dices ¿cómo alguien puede tener tan mal karma?. Definitivamente, una lectura muy recomendada y por ello, le daré 5/5 estrellitas.