Lectura. Sed

Sed
Neil Shusterman
Páginas: 424

Año: 2019
Nocturna Ediciones

Alyssa vive con su familia al sur de California, en un barrio residencial muy apacible... Hasta que, un día, del fregadero deja de salir agua. Tras padecer varios años de sequía, eso tampoco es extraño; allí todo el mundo está acostumbrado a las advertencias: no riegues el césped, no llenes la piscina, no te des duchas largas.
Pero esta vez ya no queda agua que ahorrar.
En muy poco tiempo, el supermercado del apacible barrio residencial se ha llenado de familias desesperadas y dispuestas a todo con tal de conseguir un bidón de agua. Y cuando sus padres salen en busca de provisiones y no regresan, Alyssa, su hermano y el peculiar vecino que los acompaña no tienen más remedio que empezar a tomar decisiones difíciles para sobrevivir. Cueste lo que cueste.

Hace tiempo que leí Nimbo y Siega, las primeras novelas que caían en mis manos de Neil Shusterman, haciendo que descubriera un autor que escribe muy bien y con una creatividad escritora envidiable. Sin saber muy cómo ha caído entre mis manos, otra de sus novelas: Sed. 

La novela vira entre varios protagonistas: Alyssa, Garret y Kelton, quienes aparecen los primeros pues son hermanos los dos primeros y vecino de ellos el último y más tarde, se incorporarán Jacqui y Henry. 

La historia nos relata como la sequía ha comenzado a hacerse cada vez más dura en California. Las restrictivas normas son cada vez más duras y la ausencia de agua es inminente, tanto que un día sin ningún aviso el agua deja de salir del grifo. La sed de respuestas y la SED real empieza a hacer mella en los ciudadanos de uno de los estados más poblados de Estados Unidos, y con la sed la locura parece apoderarse de los ciudadanos.

Alyssa es una joven de dieciséis años que se encontrará con casi nada de agua en su poder y con sus padres desaparecidos en esa vorágine de búsqueda de agua, sin poder contactar con ellos. Será la responsable de mantener a salvo a Garrett, su hermano.
Kelton, es el vecino rarito de Alyssa, cuya familia parece preparada para cualquier apocalipsis, cuenta con medidas de seguridad extremas y con alimentos y agua, con lo cual Kelton se convierte en un buen aliado de Alyssa. Y es que, la necesidad hace juntarse a gente que hasta entonces no tenían nada en común.

Por diferentes circunstancias los tres se ven envueltos en una búsqueda de agua y de un refugio al que parece que no llegan nunca. Al grupo se les juntará Jacqui, una chica con malas pulgas y Henry, un encantador de serpientes del que no saben muy bien qué esperar. 

 

Las personalidades de cada uno de ellos son completamente diferentes, y por tanto, la manera de gestionar los conflictos y la realidad de la falta de agua también lo son, dejándonos ver diferentes perspectivas.

Sed nos deja ver como la sed enloquece a una población que hasta entonces parecía normal, pero cuya falta del preciado líquido la hace volver loca, agresiva y que refleja con crudeza ciertos comportamientos que no sería tan raro que se diesen en una situación de tal calibre, y es que al final se trata de simple supervivencia.

Sed es una novela postapocalíptica que nos hace pensar sobre la necesidad de ser cuidadosos con los recursos naturales como el agua y del reciclaje, ya que es una situación que no parece tan alejada de la realidad. 

No ha sido tan creativa como las dos novelas que nombraba al inicio de la reseña pero si que me ha gustado y me ha resultado entretenida, haciendo que en momentos no pudiese dejar de leer.