Lectura. El jinete de bronce (III). El jardín de verano

La última parte de El Jinete de Bronce es El Jardín de verano, tras Tatiana y Alexander, donde hagamos memoria, Tatiana rescata a Alexander del campo de concentración soviético al borde del delirio y la muerte, ambos consiguen pasar a las fronteras occidentales alemanas y conseguir un pasaporte para Estados Unidos. Su hijo, Anthony, permanece este tiempo en Nueva York.

Así pues, Paullina Simons (no sabemos por qué) decidió hacer una tercera parte a pesar de haber cerrado la historia en el anterior. Nos encontramos entonces a ambos protagonistas en tierras americanas después de haber conseguido superar las primeras trabas para poder regresar.

Ambos intentan superar las heridas y traumas que les ha supuesto la II Guerra Mundial, la han vivido muy muy de cerca y cada uno tiene sus fantasmas interiores. Incluso el pequeño Anthony tiene pesadillas, y eso que ni siquiera la vivió directamente.

Esta historia es apasionada en algunos momentos pero al mismo tiempo irritante pues la autora nos lleva por un viaje a través de las tierras de Estados Unidos: Florida, California, Arizona, donde se instalan finalmente en su cautivador desierto, y es irritante porque conocemos más a Tatiana y Alexander, pero quizás no nos guste demasiado como evolucionan. Mientras que ella intenta ser independiente y dar todo el amor y comprensión a su marido traumatizado pero también a la sociedad decidiendo continuar su trabajo como enfermera. Alexander no parece tan convencido del asunto y le molesta sobremanera que ella dedique su tiempo a eso cuando es el hombre de la casa y quien tiene que mantener el hogar, además se vuelve excesivamente protector y controlador... y bueno, ya sabemos que pasa en estas situaciones, que puede destrozar un personaje tan bueno y apasionado como Alexander para convertirlo en un poco capullo, por más que se arrepienta luego.

Tenemos entonces la historia de esta pareja a lo largo de los años en Phoenix, vivimos el crecimiento de Anthony, las disputas, la construcción de su casa, embarazos deseados pero también tenemos un poco de acción con la guerra de Vietnam en los años 60, muy controvertida puesto que el no tan pequeño Anthony decide seguir la carrera militar de su padre y enrolarse en la misión pero sobre todo amor, mucho amor aún con tormentos de por medio.

Es una novela que no está mal pero que deja mal sabor de boca en comparación con las otras dos partes anteriores, ya que se hace pesada en algunos tramos pero bueno, aún así se puede recomendar.